sábado, julio 05, 2008

El sueño de Alape revivió. “Monumento a la Opresión”

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CALIGRAFÍAS
Con-textos de Ciudad y Humanidad
No. 6. Oct.-Nov. 2008. Nueva época.
TITULO-LOGO y contenido (Imagen más adelante)
Primera página (Imagen más adelante)
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La edición contiene el texto:
"ARTURO ÁLAPE o el valor de una conciencia humanística excepcional" *
Por Luis Alberto Díaz Martinez, Escritor y comunicador independiente.
* En este blog trataremos de publicar el texto completo.
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Recuperación “Monumento a la Opresión”
EL PAIS, Cali, Julio 05 de 2008 http://www.elpais.com.co/historico/jul052008/VIVIR/far7.html
Reprodujo y difunde: NTC … Nos Topamos Con … http://ntcblog.blogspot.com/ , ntcgra@gmail.com
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FOTO: http://www.elpais.com.co/historico/jul052008/fotos-periodico2/violinistas.JPG Recuperación. Los niños de la orquesta infantil que apoya la Fundación Sidoc, se sumaron al acto de recuperación del Monumento a la Opresión en el barrio Tierrablanca, en Siloé. Foto: Áymer Álvarez / El País
Por Ricardo Moncada Esquivel, reportero de El País.







Un grupo de entidades lideraron la recuperación del Monumento a la Opresión que gestaron hace 50 años Arturo Alape y Alfredo Castañeda.
Los días 8 y 9 de junio de 1954 estremecieron al país. En Bogotá, durante una manifestación, doce estudiantes murieron a manos del Ejercito que defendía la dictadura del General Rojas Pinilla.
Esos terribles acontecimientos conmocionaron a un joven estudiante en Cali. Tenía 20 años y se llamaba Carlos Ruiz, el mismo que años más tarde sería reconocido con el seudónimo de Arturo Alape, por sus escritos sobre la violencia en Colombia.
Obsesionado con la idea de rendirle un tributo a esos estudiantes caídos bajo el yugo dictactorial, Ruiz promovió la creación de un monumento que recordara aquél hecho histórico. Para ello contó con la colaboración de su amigo, el escultor Alfredo Castañeda.
Sobre una superficie rocosa de tres metros de altura fueron esculpidas por Castañeda las figuras de una madre que acuna a un estudiante, y junto a ellos aparecen un obrero. Una de las manos de la mujer se levanta airosa sosteniendo la cabeza de un militar. La obra se tituló Monumento a la Opresión.
Alape eligió como destino final de la obra a la agreste loma de Siloé, sitio que para entonces era colonizado, en una lucha abierta contra la autoridad, por personas que venían desplazadas de otras regiones. La obra escultórica se convirtió en testigo de su vida cotidiana.
Los vecinos del lugar dicen que algunas parejas de enamorados aprovechaban algunas grietas que se abrieron en la escultura para penetrar en su interior y expresarse a plenitud sus sentimientos. Es por eso que aseguran que muchos de sus habitantes fueron engendrados bajo su sombra protectora.
Pero también sufrió los rigores de la guerra, como cuando se dieron en el sector los enfrentamientos entre el movimiento guerrillero M-19 y el Ejército, a comienzos de los años 80. Según narran los vecinos, una bazuca disparada durante los enfrentamientos dejó en el monumento un gran foramen como testimonio de aquellos hechos.
Hace unos años Alape regresó al lugar y se sorprendió de ver que aquél proyecto que hacía parte de sus gestas de su juventud aún se mantenía con terquedad en pie, en lo más alto de la loma.
Entonces se le volvió una obsesión recuperarlo: “El sueño que él tenía estaba ligado a su deseo de recuperar la memoria del sector y hacía parte también del proyecto de una novela que escribiría sobre la Cali de los años 50 que a él le tocó vivir. Uno de los aspectos de dicha novela tendría que ver con la historia del monumento”, explico Katia González, viuda del escritor. Pero Alape falleció hace dos años dejando truncado su sueño.
Cincuenta años después de su creación, dicha obra ha sido recuperada gracias a la gestión mancomunada de la Fundación Sidoc*, la Fundación Nueva Luz y el Centro Cultural La Red.
“Más vale tarde que nunca”, dijo el escultor Afredo Castañeda, creador del Monumento y quien se encargó de su restauración. “Uno de los anhelos del Maestro Arturo Alape era poder restaurarlo, infortunadamente no se pudo hacer cuando el estaba vivo”, agregó.
Ayer en la tarde, en un acto especial en el inmediaciones de la obra, se hizo entrega del monumento ya restaurado. Fue una ceremonia sencilla dominada por la alegría de la orquesta infantil, integrada por los niños del sector.
Ellos representaron la esperanza y la fe en que las nuevas generaciones conservarán este espacio como un ícono de la ciudad.
Castañeda recordó que cuando idearon el proyecto vivía con Alape en el barrio Libertadores. “Con un grupo de estudiantes entusiastas de la Universidad del Valle y Santa Librada, trajimos las partes de la escultura y la armamos en medio de muchas dificultades. Aunque estaba deteriorada, la obra resistió el paso de los años y ahora está completamente recuperada. El monumento ha quedado esplendoroso y puede durar cien años más. Para entonces no estaremos nosotros pero estará nuestro espíritu para guiar a los que lo tengan que recuperar".
Siloé visible
El proyecto de recuperación del Monumento a la Opresión, hace parte del programa Siloé Visible que lidera la Fundación Sidoc*, entidad que maneja los programas de responsabilidad social de la Siderúrgica de Occidente, y que tiene entre sus objetivos quitarle el estigma a las zonas de ladera de la ciudad como espacios vedados, mediante la recuperación del espacio público y programas sociales con la comunidad. “Se ha contado con el apoyo de los líderes del sector. A través de los programas desarrollados se ha conseguido disminuir los índices de violencia”, explicó Eduardo Llano, director de relaciones institucionales y gestión de Sidoc.
Arturo Alape
Origen: Nació en Cali el 3 de noviembre de 1938.
Actividades: Fue miembro de las Juventudes Comunistas, Juco, y se desempeñó como escritor, investigador, dramaturgo, periodista y pintor.
Obras: ‘Diario de un Guerrillero’, ‘Las muertes de Tirofijo’, la serie ‘El Bogotazo’, ‘La hoguera de las ilusiones’ y ‘El Cadáver Insepulto’.